10 síntomas + 7 consejos para ayudar a la recuperación
Extracto de un artículo por Kathleen McCoy
Dr. Axe Co-Founder of Ancient Nutrition
Agarrarse dramáticamente el pecho y hundirse lentamente en el suelo, es a menudo la forma en que se presentan los infartos cardíacos en la televisión y las películas. Y aunque los síntomas de un infarto pueden surgir repentinamente y ser bastante intensos, con mayor frecuencia los síntomas comienzan más lentamente y son más leves.
Un infarto cardíaco es un evento en el cual el flujo de sangre rica en oxígeno se limita o se interrumpe antes de que llegue al corazón. Las arterias coronarias estrechadas debido a la acumulación de placa (aterosclerosis) suelen ser las culpables. Cuando las partículas de placa se sueltan y se desprenden, se forma sangre a su alrededor y se forma un coágulo. Este coágulo puede bloquear el flujo de sangre por completo y provocar isquemia.
Cuando su corazón se daña debido a la isquemia, el evento puede denominarse infarto cardíaco (también conocido como infarto de miocardio). Aunque algunas personas experimenten señales de advertencia, si la causa del infarto cardíaco es la aterosclerosis, por lo general, un infarto puede ocurrir repentinamente, sin ninguna señal de advertencia perceptible.
¿Un paro cardíaco o un infarto cardíaco?
Es importante tener en cuenta la diferencia entre un paro cardíaco y un infarto cardíaco. Un infarto surge cuando hay un problema en la circulación de sangre rica en oxígeno, mientras que un paro cardíaco es causado por un problema eléctrico o mecánico en el corazón, como un latido cardíaco anormal o irregular o una arritmia.
El paro cardíaco hace que el corazón se detenga repentinamente y un infarto cardíaco puede causarlo. La muerte puede ocurrir dentro de unos momentos después de que el corazón deja de latir. Tanto los infartos cardíacos como los paros cardíacos pueden tratarse, pero el tiempo es esencial. La resucitación cardiopulmonar y el uso de un desfibrilador para devolver el corazón a un ritmo normal pueden revertir el paro cardíaco.
Signos y síntomas
El tipo y la gravedad de los síntomas de un infarto de miocardio varían de persona a persona y según el género. Los siguientes síntomas son comunes, pero es importante comprender que cuantos más síntomas tenga al mismo tiempo, mayor será la posibilidad de que esté teniendo un infarto:
- Presión, dolor, o sensación de opresión en el pecho que puede irradiarse al cuello, la mandíbula o la espalda.
- Náuseas
- Indigestión
- Acidez estomacal
- Dolor abdominal
- Falta de aliento
- Sudores fríos
- Fatiga
- Aturdimiento
- Mareos repentinos
Especialmente en las mujeres
Los síntomas de un infarto cardíaco en las mujeres pueden ser más sutiles, y muchas mujeres informan que creían que sus síntomas se debían al envejecimiento, al reflujo ácido o incluso a la gripe. Los síntomas previos al infarto en las mujeres pueden incluir:
- Fatiga inusual
- Sudoración y dificultad para respirar
- Dolor que se irradia desde el pecho a la mandíbula, la espalda o el cuello.
Para las mujeres, a veces puede ser difícil diferenciar entre los síntomas de un infarto cardíaco y los síntomas de ansiedad o de un ataque de pánico. Estas dos condiciones pueden presentarse de manera muy similar con síntomas que incluyen vértigo, mareos, palpitaciones, entumecimiento en las extremidades, temblores e incluso desmayos.
Hombres menores de 40 años
Los síntomas de un infarto cardíaco en hombres menores de 40 años incluyen muchos de los síntomas comunes mencionados anteriormente. El verdadero desafío para este grupo es que los hombres jóvenes, aparentemente saludables, pueden experimentar un evento cardíaco repentino. A menudo, vemos esto en atletas jóvenes cuando los síntomas sutiles se descartan como sobreesfuerzo.
Factores de riesgo
- Hombres de 45 años de edad y mayores
- Mujeres de 55 años de edad y mayores
- Tabaquismo o exposición a largo plazo al humo de segunda mano
- Hipertensión
- Colesterol alto en la sangre
- Niveles altos de triglicéridos
- Diabetes
- Historia familiar
- Fibrilación auricular
- Falta de actividad física
- Obesidad
- Estrés
- Uso de drogas ilegales
- Historial de preeclampsia
- Enfermedades autoinmunes como lupus o artritis reumatoide.
¿Cómo impulsar la recuperación de un infarto cardíaco?
- Participar en rehabilitación cardíaca: Después de un infarto cardíaco, es probable que su cardiólogo le sugiera que participe en un programa de rehabilitación cardíaca. Muchos hospitales brindan este programa ambulatorio para ayudar a los sobrevivientes de un infarto cardíaco a recuperarse.
- Estos programas consisten en una combinación de disciplinas que se enfocan no solo en su recuperación, sino también en reducir el riesgo de futuros eventos cardíacos. Las sesiones a menudo consisten en apoyo emocional y mental, ejercicio físico y creación de un estilo de vida saludable para el corazón personalizado.
- Manejar las condiciones subyacentes: Muchas condiciones subyacentes, como la presión arterial alta, el colesterol alto y la diabetes, aumentan el riesgo de infartos cardíacos. El tratamiento eficaz de estas afecciones puede ayudar a mejorar el tiempo de recuperación.
- Dejar de fumar: Si fuma, deje de fumar ahora y evite el humo de segunda mano.
- Bajar de peso: Si tiene sobrepeso, coma una dieta saludable rica en nutrientes para quitarse los kilos de más. Llegar a un peso saludable y mantenerlo está relacionado con una mejor salud del corazón.
- Ejercicio: Los sobrevivientes de un infarto cardíaco a menudo dudan en hacer ejercicio por temor a sufrir otro infarto. Sin embargo, una vez que su cardiólogo determine que es seguro para usted hacer ejercicio, siga sus recomendaciones. Recuerde ser amable contigo mismo; su cuerpo ha sobrevivido a un evento traumático y pasará algún tiempo antes de que se encuentre en los niveles previos al infarto.
- Tratar la depresión: La depresión es muy común después de un infarto cardíaco y los síntomas pueden durar seis meses o incluso más. La ansiedad, la ira, la irritación, el resentimiento y la baja autoestima también pueden ser parte de la ecuación. La terapia de conversación o un grupo de apoyo, la luz del sol y la inhalación de aceite esencial de manzanilla pueden ayudar. Una vez más, sea amable consigo mismo durante la recuperación; es un proceso que requiere sanación de la mente, el cuerpo y el espíritu.
Coenzima Q10 (CoQ10), 100 miligramos dos veces al día
Después de un evento cardíaco, es posible que le receten estatinas para ayudar a prevenir otro ataque cardíaco. Tomar un suplemento de Coenzima Q10 (CoQ10) puede ayudar a reducir los efectos secundarios del medicamento mientras ayuda a regular la presión arterial.
En un ensayo clínico prometedor de dos años de duración en pacientes con insuficiencia cardíaca, de moderada a grave, los pacientes recibieron un placebo o un suplemento de CoQ10. A los dos años los que recibieron CoQ10 tuvieron significativamente menos eventos cardiovasculares adversos, una menor tasa de mortalidad y una menor cantidad de hospitalizaciones. Los investigadores recomiendan 100 miligramos dos veces al día en lugar de una sola dosis de 200 miligramos una vez al día debido a mejores tasas de absorción.
Precaución
Los infartos cardíacos pueden ser fatales. Llame al 131 de inmediato si experimenta dolores en el pecho además de otros síntomas comunes de un infarto.
Fuente: https://draxe.com/health/heart-attack-symptoms/